La sombra de las armas estadounidenses utilizadas por el ejército israelí se extiende sobre los muertos en Rafah, mientras los tanques con la Estrella de David continúan bombardeando la ciudad sureña de Gaza y en el Consejo de Seguridad de la ONU el embajador adjunto de Estados Unidos dice tener “el corazón destrozado” por la masacre de hace dos días.
Y fue la cadena CNN, al analizar un video compartido en las redes sociales y consultar a expertos en explosivos, la que reveló que, en la escena del ataque a las tiendas que provocó 45 muertos, es visible la cola de una bomba de pequeño diámetro (SDB) GBU-39 de fabricación norteamericana.
El efecto sorpresa no está, dado el conocido apoyo militar de Washington a Israel, sino en la masacre que hizo horrorizar una vez más al mundo al hacer evidente el cortocircuito entre la condena de Washington y la paternidad de al menos una parte de las armas usadas.
En tanto, fuentes palestinas citadas por los medios denunciaron que los continuos bombardeos en la zona oriental de Rafah -donde la mayor parte de los habitantes huyó- provocaron heridos, destruyeron casas e incendiaron depósitos de ayuda humanitaria. Una guerra que está destinada a durar largo tiempo.
“Los combates en Gaza continuarán por otros 7 meses”, dijo el Consejero para la Seguridad Nacional de Israel, Tzachi Hanegbi, en una entrevista al Canal 2. Mientras las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF, sigla en inglés) anunciaron que tomaron el “control operativo” sobre el entero Corredor Filadelfia, que recorre un total de 14 kilómetros en el confín entre Gaza y Egipto donde, según el ejército, existen al menos 20 túneles que llegan a Egipto.
El Cairo, por su parte, desmintió la existencia de pasajes subterráneos bajo el paso de Rafah. “No hay túneles de Hamás bajo el cruce”, afirmó una fuente egipcia de alto nivel a la emisora estatal Al Qahera, subrayando asimismo que “Israel utiliza estas excusas para justificar la continuación de la operación palestina”, y “eludir sus crisis internas”.
Y mientras el presidente chino, Xi Jinping, dijo a su par egipcio, Abdel Fattah al-Sisi, durante una visita a Pekín, que China está “profundamente entristecida” por la “muy grave” situación humanitaria en Gaza, el debate internacional sobre la situación en la Franja se trasladó a la ONU.
“Cualquier documento en este momento no será útil y no cambiará la situación en el terreno. Queremos seguir apoyando los esfuerzos para lograr un pacto sobre los rehenes y otra ayuda a Gaza”, comentó el embajador adjunto de Estados Unidos ante la ONU, Robert. Wood, conforme el proyecto de resolución de Argelia que pide a Israel “detener inmediatamente su ofensiva militar en Rafah”.
A Rusia, sin embargo, le gusta la iniciativa argelina.
Conforme la embajadora adjunta de Rusia ante la ONU, Anna Evstigneeva, “el Consejo de Seguridad de la ONU debe seguir presionando a Israel y a su aliado Estados Unidos”. De la misma opinión es el representante diplomático de Francia ante Naciones Unidas, Nicolas de Rivière, para quien el Consejo “debe expresarse urgentemente sobre la situación en Rafah y pedir el fin de esta ofensiva”.
El presidente Emmanuel Macron redobló su marcación sobre Israel al efectuar un llamado conjunto con su colega palestino Abu Mazen, escuchado por teléfono, para que “cese inmediatamente la intervención militar israelí en Gaza”. Y no solamente. Macron entró en la cuestión del reconocimiento del Estado palestino -formalizado por España, Irlanda y Noruega- pidiendo a Abu Mazen “reformar” la ANP precisamente con la “perspectiva de reconocer el Estado de Palestina”. También Italia fue puesta en cuestión.
En una llamada telefónica con la primera ministra Giorgia Meloni, el presidente turco, Recep Tayyp Erdogan, dijo que esperaba que Italia estuviera “en el lado correcto de la historia” siguiendo el ejemplo de los tres países.
El propio Erdogan, en un discurso ante su grupo parlamentario AKP, requirió al mundo islámico que adopte “una decisión compartida” contra Israel, mientras que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, invocó “sanciones” contra la Corte Penal Internacional al recibir en Jerusalén a la ex embajadora ante la ONU y exponente republicana Nikki Haley, que terminó en una tormenta por haber escrito con un marcador en algunos misiles israelíes “Finish them”, es decir elimínalos, el día después de la indignación internacional por la incursión que mató a decenas de civiles en Rafah. (tomado de ANSA Latina).
Leave a Reply