Naciones Unidas-. El embajador alterno de Venezuela ante la ONU, Joaquín Pérez, demandó hoy el levantamiento del bloqueo de Estados Unidos a Cuba, al cual calificó de política fracasada.
Al intervenir en el 77 periodo de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), el diplomático reiteró el apoyo solidario de Caracas al pueblo y Gobierno cubanos ante el cerco genocida estadounidense, que por más de 60 años impone Washington a la isla.
Pérez denunció “el carácter ilegal, criminal, cruel e inhumano” del bloqueo contra la nación de las Antillas, el cual, expresó, constituye el principal obstáculo para el desarrollo del pueblo cubano y cuyos efectos son tan destructores y letales como los de cualquier guerra convencional.
Los datos oficiales indican que en los primeros 14 meses de la administración de Joe Biden los daños provocados por el cerco económico ocasionaron a la isla pérdidas por seis mil 364 millones de dólares, a precios corrientes.
El embajador venezolano llamó a poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero a La Habana, el que a su juicio representa un crimen contra la diversidad planetaria y un ataque contra todo el sistema de relaciones internacionales.
Con esa política, subrayó, se pretende negar la soberanía nacional al pueblo cubano.
Consideró que a pesar de las medidas de terrorismo económico, Cuba continúa renovando su vocación humanista, y su espíritu de cooperación y solidaridad desinteresada con todos los pueblos del mundo.
El diplomático preguntó ¿cuánto más podría darnos Cuba si se levantaran aquellas medidas fracasadas que le impiden el desarrollo pleno de sus capacidades y potencialidades?
Afirmó que en medio de la actual coyuntura, el mundo no necesita más de bloqueos, sino “más diálogo, tolerancia y respeto por la Carta de las Naciones Unidas».
Venezuela, expresó, conoce de primera mano los efectos perniciosos de los bloqueos económicos, comerciales y financieros, por lo que manifestamos nuestro respaldo y solidaridad con Cuba, en la justa lucha de su pueblo por la dignidad y por el derecho a ser dueños de su destino, que es inquebrantable.
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