
Brasilia-. La Procuraduría General de la República (Fiscalía) de Brasil debe denunciar en los próximos días al exmandatario ultraderechista Jair Bolsonaro, inelegible electoral hoy hasta 2030 al abusar del poder político, por tentativa golpista en 2022.
La expectativa entre los miembros del Supremo Tribunal Federal (STF) y el Congreso Nacional es que esto ocurra en febrero.
Según la estación televisiva CNN Brasil, con la reanudación de los trabajos en el Legislativo y el Poder Judicial también se acerca el momento decisivo para la investigación sobre los episodios antidemocráticos del 8 de enero de 2023, y actos que preceden a la fecha y son considerados golpistas por los ministros de la corte superior.
Hasta la fecha, todo lo que la pesquisa concluyó se refiere a la mirada de la Policía Federal (PF).
De acuerdo con la televisora, a partir de la denuncia se hacen análisis y ponderaciones por el fiscal general de la República, Paulo Gonet.
La PF acusó a Bolsonaro y a otras 39 personas por los crímenes de abolición del Estado Democrático de Derecho, intento de golpe de Estado y organización criminal.
Entre los imputados figuran exministros de su Gobierno (2019-2022) como los generales Walter Braga Netto (de Defensa y la Casa Civil, y actualmente detenido), Augusto Heleno (del Gabinete de Seguridad Institucional), Paulo Sérgio Nogueira (Defensa) y el excomandante de la Marina Almir Garnier.
CNN precisó que, para no contaminar el año electoral de 2026, ministros del STF apuestan por el caso aún en este calendario.
Hay posibilidad de que Gonet corte las denuncias en grupos, lo cual daría más celeridad para el Supremo juzgar aún este año.
Corresponderá entonces al STF evaluar las denuncias y si es posible convertir investigados en acusados.
Después de este proceso, la Corte Suprema aún tendría que marcar el juicio de fondo de las acusaciones de que la Administración de Bolsonaro, incluyendo el entonces presidente, intentó aplicar un conato golpista en el país.
Además, figuran entre las imputaciones un aparente complot para asesinar al presidente Luiz Inácio Lula da Silva y al vicepresidente Gerardo Alckmin en 2022, y un designio de ataque contra instituciones clave como el STF, y en particular eliminar al ministro Alexandre De Moraes.
Si definitivamente se presenta la inculpación de la Fiscalía, el Supremo deberá decidir si acepta los cargos y abre un juicio penal. Las causas suman 28 años de cárcel.
Conjuntamente con la trama golpista, Bolsonaro fue acusado en otras dos investigaciones: por un supuesto fraude en la tarjeta de vacunación de la Covid-19 y apropiarse de forma ilegal de joyas sauditas.
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