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México y Cuba, una relación de hermanos

Las históricas relaciones entre México y Cuba, mantenidas de manera ininterrumpida durante los últimos 120 años, recibieron un nuevo impulso con la visita oficial a esa nación, del Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

«Bienvenido, Presidente Miguel Díaz-Canel. Es muy satisfactorio, un honor recibirlo aquí en Campeche, en nuestro país, que es el suyo en su calidad de dirigente del pueblo digno de Cuba», expresó el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, al recibirlo en el aeropuerto internacional de esa ciudad.

Al repasar las históricas relaciones que unen a los pueblos de México y Cuba, López Obrador recordó a José Martí y a otros próceres latinoamericanos que hicieron causa común, y habló también del yate Granma, que zarpó del puerto de Tuxpan con un grupo de revolucionarios comandados por Fidel.

«Por eso y muchas otras cosas más, usted, Presidente Miguel Díaz-Canel, es para el Gobierno que represento, para el Gobierno de México, un huésped distinguido, admirado y fraterno. Gracias por venir», le ratificó López Obrador.

De acuerdo con reportes del sitio de la Presidencia de la República de Cuba, el dignatario cubano dijo que le alegraba y honraba mucho volver a pisar tierra mexicana, para reencontrar a los amigos y compartir, aunque sea unas pocas horas, con esta parte entrañable de la familia latinoamericana. «Venimos a devolver en persona el abrazo que recibimos en horas difíciles e inciertas, junto con la ayuda material y la asesoría técnica, en áreas y actividades vitales», agregó Díaz-Canel, al referirse a la solidaridad recibida durante el incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas.

Por eso México, añadió Díaz-Canel, «es también el presente, solidario, honesto y justiciero que constantemente se expresa en los gestos y en la palabra de su Gobierno. Por eso, y porque así lo demanda nuestro pueblo, le traigo un mensaje de profundo respeto y cariño al hermano pueblo mexicano y a su presidente, Andrés Manuel López Obrador. Se les quiere mucho en Cuba», enfatizó.

UNA ORDEN AL PECHO DEL PUEBLO CUBANO

Al agradecer la entrega de la Orden Mexicana del Águila Azteca, en el grado de Collar, que recibió de manos del presidente López Obrador, Díaz-Canel afirmó que lo hacía con «humildad e infinito agradecimiento, porque soy consciente de que el auténtico merecedor de tan significativo reconocimiento es el noble y heroico pueblo cubano».

Habló a los presentes acerca de su convencimiento de que esta distinción «reafirma el compromiso solidario que caracteriza nuestras profundas relaciones, ayer, hoy y siempre. Las nuevas generaciones cubanas nunca olvidarán la ayuda incondicional, desinteresada e inmediata de México, en momentos de profunda tristeza y dolor para Cuba», dijo el mandatario.

Díaz-Canel se refirió, asimismo, a los avances alcanzados en los vínculos bilaterales y la decisión de identificar nuevas oportunidades y proyectos que beneficien a ambos pueblos, y reiteró a López Obrador la certeza de que la hermana nación mexicana siempre encontrará en Cuba «a un pueblo amigo, hermano y vecino, dispuesto a enfrentar juntos los más difíciles y complejos retos. Así como lo han hecho ustedes, siempre estaremos listos para servir a México».

CUBA MERECE EL PREMIO DE LA DIGNIDAD

Ante las palabras de Díaz-Canel, el presidente mexicano dijo del pueblo de Cuba que, por su lucha en defensa de la soberanía, merece el Premio de la Dignidad. Esa Isla, destacó, debe ser considerada como la nueva Numancia, «por su ejemplo de resistencia», razón por la cual «debiera ser declarada Patrimonio de la Humanidad».

Refiriéndose a la política estadounidense hacia América Latina, señaló que es el momento de una «nueva convivencia entre todos los países de América, porque ese modelo impuesto hace más de dos siglos está completamente agotado, es anacrónico, no tiene futuro ni salida y no beneficia a nadie.

«Y como señal de buena voluntad, de que se está en disposición de hermanarnos entre todos los países de América, considero y lo expreso con respeto, que el Gobierno de Estados Unidos debe, lo más pronto posible, levantar el bloqueo injusto al pueblo de Cuba», significó López Obrador, quien recordó a Washington que las naciones no deben aprovecharse del infortunio de otros pueblos.

PIEDRA CUBANA EN TIERRA MAYA

Tras el recibimiento, y luego de conducirlo hasta la zona arqueológica Edzná, donde se efectuó la condecoración referida, el presidente López Obrador guió a Díaz-Canel hasta una de las obras del Tren Maya, en las afueras de la ciudad de Campeche.

Allí, el Jefe de Estado cubano conoció que es la obra ferroviaria más importante que se acomete hoy en el mundo, y tendrá 1 554 kilómetros de longitud, de los cuales casi 250 se sostendrán sobre piedras cubanas traídas desde la mina Ariete, de Cienfuegos.

«Esta es una obra muy importante, y lo van a lograr», señaló Díaz-Canel a Andrés Manuel López Obrador».

Del total de metros cúbicos de balastro, que requiere la monumental infraestructura, Cuba suministrará 876 789 metros cúbicos; es decir, el 15,5 % del volumen total, lo que significará que, con piedra rajón cubana podrán cubrirse casi 250 kilómetros de los más de 1 500 que tendrá la vía.

PATRIA ES HUMANIDAD

El Presidente Díaz-Canel, acompañado por el mandatario mexicano, sostuvo también un encuentro con una representación de colaboradores cubanos de la Salud que se encuentran en este país, y con personal del Instituto Mexicano de Seguro Social.

«Su presencia aquí, a solicitud del Gobierno mexicano, se suma a los esfuerzos de este país para garantizar una atención médica integral y de calidad a poblaciones que nunca habían recibido tales servicios, o apenas podían acceder a ellos», señaló el Jefe de Estado cubano.

Ustedes, dijo Díaz-Canel, hacen realidad cada día el ideal martiano de que «Patria es Humanidad», uno de los conceptos más citados y convertido en práctica revolucionaria por Fidel, el mejor y más completo seguidor de las ideas del Apóstol.

Como última actividad de la intensa jornada, los presidentes Díaz-Canel y López Obrador encabezaron los diálogos de las delegaciones oficiales, realizadas en el Salón de Protocolo del Centro Cultural El Palacio, en el centro histórico de Campeche.

En la introducción de los intercambios, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, reiteró el firme reclamo de México de que Cuba sea excluida de la lista de países patrocinadores del terrorismo.

Esta es, dijo, una medida injusta, con consecuencias muy negativas para la población cubana, además de ser infundada, más cuando Cuba es un país de paz.

AMLO –como le dice familiarmente el pueblo mexicano a su Presidente– y Díaz-Canel estuvieron acompañados durante la visita por las delegaciones oficiales de ambos países, que incluyeron, por la parte mexicana, al canciller Marcelo Ebrard; al secretario de Gobernación, Adán Augusto López; al secretario de Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval; al secretario de la Marina, José Rafael Ojeda; al coordinador de los asesores del presidente, Lázaro Cárdenas Batel, y a la gobernadora de Campeche, Layda Sansores.

Por la parte cubana participaron el miembro del Buró Político del Partido y canciller, Bruno Rodríguez Parrilla; el ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca Díaz; el titular de Salud Pública, José Angel Portal Miranda; la vicecanciller Josefina Vidal Ferreiro; el director de América Latina y el Caribe del Minrex, Eugenio Martínez Enrique; el embajador de Cuba en México, Marcos Rodríguez Costa; el presidente del grupo empresarial BioCubaFarma, Eduardo Martínez Díaz, y otras personalidades.

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