Bogotá-. Delegados de la Mesa de Diálogos de Paz del Gobierno de Colombia y del Estado Mayor Central de las FARC (EMC-FARC) instalaron el segundo Mecanismo Regional de Veeduría, Monitoreo y Verificación (MVMV) del país, informaron hoy fuentes oficiales.
El establecimiento de dicha entidad, ubicada en el municipio Villavicencio del departamento Meta, a unos 120 kilómetros al sureste de esta capital, hace parte de los acuerdos suscritos entre el Gobierno Nacional y el grupo armado, divulgó hoy el sitio oficial de la Presidencia de la nación.
El aparato tiene cobertura en el oriente del país y en la Amazonía colombiana, que incluye a los departamentos del Meta, Guaviare, Tolima, Huila y Caquetá.
Añadió el comunicado que esa instancia se encargará de verificar el cumplimiento de los compromisos del cese al fuego bilateral, pactado entre el Gobierno Nacional y el Estado Mayor Central de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
También, agregó, cumplirá una labor preventiva para evitar choques entre las partes y daños o violaciones de derechos a la población civil.
Su marco de trabajo es el Derecho Internacional Humanitario, tal y como fue acordado durante la instalación de la Mesa de Diálogos de Paz en Tibú, Norte de Santander, el 16 de octubre de 2023, detalló la comunicación.
La prevención, el análisis de los incidentes y la verificación desde el Mecanismo Regional del Meta, beneficiará a las comunidades de estos territorios y los reportes que genere serán remitidos al MVMV Nacional, acotó además.
El aparato de Villavicencio es el segundo instalado de los cinco acordados, después del de Bucaramanga.
Su conformación contó con la presencia de representantes del Ministerio de Defensa Nacional, Fuerzas Militares y de Policía, la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, el Estado Mayor Central de las FARC, la Conferencia Episcopal, el Consejo Mundial de Iglesias y Naciones Unidas en calidad de observador.
Los integrantes del Mecanismo estarán acompañados además por dos representantes de la Iglesia católica y uno del Consejo Mundial de Iglesias, reseñó la nota.
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