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Volteemos las miradas a los cronopios (+ fotos)

“Al llegar al corazón el tiempo no puede ya medirse, y en la infinita rosa violeta del centro el cronopio encuentra un gran contento”,  Julio Cortázar


Cuando se hable de niños especiales, sin lugar a dudas habrá que mencionar a los que desarrollan habilidades para el arte, la escritura, el baile, la música, el deporte… pero esta vez hablemos de esos que son especiales porque permiten a otros dar muestras diarias de amor, a veces impensables.

Claudio Ramírez Panque, tiene 12 años. Es un amante de la radio, la televisión y el periodismo… tiene una memoria envidiable y ha desarrollado habilidades comunicativas que le permiten relacionarse de forma “especial” con su familia, amigos, compañeros de aula, maestros y otros conocidos.

Claudio tiene una condición especial… el trastorno del espectro autista es también parte de él y ha sido la causa para que tantas personas se articulasen para lograr que este, hoy adolescente, sea un niño tan desenvuelto y conversador. Él es el ejemplo vivo de que cuando realmente se articulan instituciones, familia y escuela en función de lograr objetivos, estos pueden tener buen término.   

Lizandra Paneque Lorente tiene 38 años. Ella es la madre de Claudio. No han sido poca las batallas por la incomprensión y el desconocimiento, pero los resultados de hoy la reconfortan.

“Ser madre de un niño autista es una experiencia que uno tiene que superar a diario. Los niños autistas ninguno es igual, por ello los métodos para enseñarlos y ayudarlos los tiene que encontrar la familia, que es su principal apoyo y son las personas que pueden logar que él avance.

“La clave todo nuestro logro con Claudio ha sido el amor y mucha ayuda de la escuela de los maestros que ha tenido, del proyecto con la trabajadora social que lo motiva mucho.  Ese apoyo ha permitido que el niño se concentre mejor, que logre realizar sus tareas con bastante independencia.

“Yo como madre lo he acompañado, pero tengo que reconocer que los niños de su grupo de clases lo han aceptado, lo han amado y lo han ayudado, todos. Desde los que empezaron en el Programa Educa a Tu hijo con él, hasta estos compañeritos que también lo han ayudado a avanzar.

“Siempre digo que las barreras no existen, no hay barrera que te imposibilite ayudar a tu hijo. Las barreras las pone la sociedad y usted le da importancia si usted quiere. En mi caso cuando mi niño fue diagnosticado, que Claudio se alejaba de los niños…habían otros niños que no lo aceptaban, otros padres alejaban a sus hijos de Claudio…y esas aptitudes golpean mucho a quienes convivimos con infantes con espectro autista.

“Las personas no entienden que los niños autistas necesitan sobre todo afecto, de cariño… que lejos de apartarlos los incluyas. Esa es la principal barrera que pudieran tener los padres, yo no. Porque cuando yo he llegado a un lugar y las personas lo han mirado extraño yo les devuelvo una sonrisa, porque son personas que, si no se acercan a él, son ellos lo que se lo pierden”, expresó Paneque Lorente.

Claudio es niño que conversa- con sus particularidades- pero lo hace, se comunica con otros niños, le gusta mucho la televisión, disfruta mucho la radio. Hay fechas de importancia para él que recuerda muy bien y es capaz de explicar por qué. Me reconforta que muchas personas lo quieren, lo ayudan, han desterrado de su mente la lástima y lo tratan sin prejuicios y eso lo hemos logrado trabajando juntos para que nuestro Claudio sea un adolsecente independiente.

Importancia del trabajo social

Yanelkis Hidalgo Ortiz, es hoy funcionaria especializada en los grupos de trabajo comunitario en el Poder Popular municipal y trabajadora social de profesió. “Es precisamente en el trabajo social donde conozco del proyecto con Reino Unido, una colaboración que se llama Cultura de Participación Equitativa entre y Reino Unido.

La directora provincial de Trabajo y Seguridad Social en Granma, Yannia Columbié me informa que íbamos a implementar un proyecto en la provincia donde se incluirían los 54 niños autistas diagnosticados que hay y que Niquero sería el municipio piloto para la implementación del mismo, con el adolescente Claudio Ramírez Paneque.”, recuerda Yanelkis.

“El trabajo con un adolescente autista es complicado, porque primero hay que estudiar las características del adolescente para saber qué acciones desarrollar. Ninguna de las acciones realizadas con Claudio se harán con otro niño que tenga la misma condición, porque son diseñas teniendo en cuenta sus aficiones, sus intereses y los resultados del diagnóstico realizado a su familia también .

“En el caso se Claudio es un niño apasionado a la radio, al periodismo y por ello creamos juegos de estimulación para que él exprese sus emociones: Juegos de Mesa para Claudio, rompecabezas para Claudio. Entre todos ideamos mezclar las actividades de este adolescente con Azul, que no es más que un personaje utilizado en el proyecto sociocultural “Por una adolescencia Feliz”. Comenzamos a hacer videos para las redes con mensajes sociales donde Claudio y Azul son los voceros de estos.

Sin embargo, aun con todo el tiempo que hemos invertido, el éxito de todo nuestro trabajo radica en el apoyo de su mamá, Lizandra Paneque, sin ella no hubiésemos logrado nada…ella es el secreto…ella es la magia. Ella siempre dice que cuando ve que a Claudio le falta cariño ella le aumenta la dosis. Se incorpora a todas las dinámicas y todas las actividades. Cada martes le dedicamos el día a Claudio, porque realizamos las dinámicas con la familia, los compañeros de aula y maestras de este niño, que ya muy pronto estará en la Secundaria.

En Niquero existen 2 niños autistas, con el otro niño ya comenzamos a realizar la caracterización del niño y la familia, para luego de realizado el estudio y contar con todas las herramientas, comenzar a diseñar las actividades propias para este infante.

 Y en aula…

Doramis Ponce Vargas,  es la maestra de apoyo de apoyo de este niño autista. Una joven docente que asumió el reto, porque sabía que él era un adolescente que necesitaba tiempo y sobre todo dedicación. La maestra destaca que, “ha sido una experiencia linda y enriquecedora, porque nunca he trabajado con niños de la enseñanza especial y para mí ha sido retador, me he tenido que documentar y sobre todo estar en constante comunicación con la familia.

“Ellos me han dado herramienta, me recuerdan cuáles son sus gustos, siempre me mantienen al tanto de cómo pasó la noche, cómo viene de carácter y teniendo como base esa información la otra maestra y yo trabajamos para que él se concentre en clases y podamos llevar el proceso docente con calidad, pues tenemos 10 niños más que también necesitan de atención”, concluye.

Sobre los trastornos del espectro autista

Los trastornos del espectro autista (TEA) son discapacidades del desarrollo causadas por diferencias en el cerebro. Las personas con TEA con frecuencia tienen problemas con la comunicación y la interacción sociales, y conductas o intereses restrictivos o repetitivos.

El trastorno del espectro autista es una afección relacionada con el desarrollo del cerebro que afecta la manera en la que una persona percibe y socializa con otras personas, lo que causa problemas en la interacción social y la comunicación. El trastorno también comprende patrones de conducta restringidos y repetitivos. El término «espectro» en el trastorno del espectro autista se refiere a un amplio abanico de síntomas y gravedad.

RELACIONADO: Trastorno del espectro autista

El trastorno del espectro autista comprende afecciones que anteriormente se consideraban independientes, como el autismo, el síndrome de Asperger, el trastorno desintegrativo infantil y una forma no especificada de trastorno generalizado del desarrollo. Algunas personas aún utilizan el término «síndrome de Asperger» que generalmente se considera que está en el período final leve del trastorno del espectro autista.

Claudio… uno de los cronopios de Cortázar

En estos tiempos de premuras, se impone para la mirada a experiencias de vida como esta… la de Claudio y su familia, quienes matizan con mucha dedicación la cotidianidad de un niño que nació para ser cronopio … en este mundo donde todos aspiramos a ser famas.

Son el mejor ejemplo de que se puede convivir con el autismo y se pueden lograr personas comunicativas siempre que nosotros seamos los primeros en romper la barrera dela incomunicación.

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