
Casi la mitad de los jóvenes de la Generación Z ha probado la inteligencia artificial (IA) para mejorar su experiencia en apps de citas, lo que representa un crecimiento significativo en solo un año, revela Independent, que cita un estudio realizado por la aplicación de citas Match.com.
Sin embargo, muchos jóvenes no parecen sentirse cómodos a la hora de dejar en manos de la IA tareas personales, como redactar mensajes o editar imágenes del perfil, reporta Bloomberg, que menciona una encuesta realizada por Attest entre unos mil usuarios de aplicaciones de citas.
¿Qué aporta la IA a las apps de citas?
Recientemente varias grandes empresas como Tinder, Hinge y Bumble, han añadido herramientas basadas en IA:
- Tinder promueve el ‘AI-powered matching’ que está diseñado para ayudar a encontrar conexiones personales basadas en preferencias e intereses únicos de la persona.
- Hinge ha anunciado su función ‘Prompt Feedback’, basada en IA, para ayudar “a los usuarios que tienen dificultades para mostrar su versión más auténtica”.
- Bumble utiliza IA para varias funciones, como el selector de fotos y las sugerencias de conversación, además de para las funciones de seguridad que ayudan a identificar y eliminar perfiles falsos, revela Fortune.
No obstante, estas novedades pueden no resultar rentables, en tanto en cuanto los usuarios jóvenes no muestran dificultad para usar las aplicaciones de citas por sí mismos.
En este contexto, desde Bloomberg apuntan a que las grandes inversiones por parte de las ‘apps’ de citas en el empleo de la IA podrían ser en vano. En particular, se señala que los ingresos de Mumble en el primer trimestre cayeron casi un 8 % interanual, mientras que los de Tinder descendieron un 3 %. Sin embargo, Hinge registra un aumento del 23 %, en los ingresos del primer trimestre en comparación con el año pasado.
Mirando hacia delante
Según Nicole D’Souza, una analista de tecnología de Bloomberg Intelligence, las aplicaciones no ofrecen funciones que respondan a las necesidades de los usuarios.
Las grandes empresas, tomando en cuenta los hábitos de millenials, intentan atraer al público joven, cuyos valores sociales difieren de otras generaciones, lo que podría llevar al hecho de que la Generación Z tiende más a evitar las citas, optando por conocer gente en persona.