Naciones Unidas-. La falta de seguridad para la labor humanitaria en Gaza limita hoy las operaciones sobre el terreno del personal de la ONU, que anunció la suspensión temporal de sus actividades nocturnas.
La medida, que se extenderá por al menos 48 horas, fue divulgada la víspera tras el asesinato de siete miembros del personal de la ONG World Central Kitchen (WCK) por un ataque israelí el lunes último.
A pesar de coordinar los movimientos con las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel), el convoy fue alcanzado cuando salía del almacén de Deir al-Balah, donde habían descargado más de 100 toneladas de ayuda alimentaria humanitaria llevada a Gaza por la ruta marítima.
“Esto no es sólo un ataque contra WCK, es un ataque contra organizaciones humanitarias que aparecen en las situaciones más espantosas donde los alimentos se utilizan como arma de guerra. Esto es imperdonable”, dijo Erin Gore, su directora ejecutiva.
Por su parte, las autoridades israelíes reconocieron su responsabilidad aunque aseguraron que se trató de una “consecuencia” del conflicto.
La lamentable muerte de los colaboradores de la ONU elevó a 196 los trabajadores humanitarios asesinados en los territorios palestinos como consecuencia de la ofensiva israelí iniciada en octubre de 2023 en respuesta a la incursión de Hamas en su territorio.
Esto es casi tres veces el número de muertos registrado en cualquier conflicto en un año, de acuerdo con el coordinador humanitario de las Naciones Unidas para Palestina, Jamie McGoldrick, quien insistió en que no se trata de un incidente aislado.
Para el secretario general de la ONU, António Guterres, el hecho es “un resultado inevitable de la forma en que se está llevando a cabo la guerra”.
“Demuestra una vez más la urgente necesidad de un alto el fuego humanitario, la liberación incondicional de todos los rehenes y la expansión de la ayuda a Gaza, como exigió el Consejo de Seguridad en su resolución de la semana pasada”, enfatizó Guterres.
La medida del miércoles limitará aún más las operaciones sobre el terreno que ya enfrentan la falta de acceso, denegaciones y demora en los permisos por parte de los israelíes.
Al anunciar la decisión, el portavoz del secretario general, Stéphane Dujarric, aseguró a la prensa que las actuales circunstancias impactan al personal en el terreno y a la población civil mientras los trabajadores intentan ayudar.
“La gente está muriendo y es esencial que continuemos entregando ayuda (…) Necesitamos que el personal y los suministros puedan moverse libremente y de forma segura a través de la Franja de Gaza”, reclamó Dujarric durante una sesión informativa.
Mientras agencias como el Programa Mundial de Alimentos intenta llevar más ayuda al norte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó otro intento sin respuesta para facilitar una misión al Hospital Al Shifa, instalación que permaneció dos semanas bajo asedio israelí también en la región norte.
Las múltiples solicitudes para comunicarse con el hospital durante las últimas dos semanas fueron denegadas, retrasadas o impedidas, confirmó la víspera la OMS.
Los retrasos y las denegaciones de misiones humanitarias no sólo nos impiden llegar a quienes las necesitan, sino que también afectan otras operaciones y entregas al desviar recursos escasos, reconoció al respecto el portavoz de Guterres.
De acuerdo con la Agencia de la ONU para Refugiados Palestinos (Unrwa), las autoridades israelíes negaron acceso al 30 por ciento de las misiones de ayuda humanitaria al norte de Gaza en el último mes.
Del 1 al 30 de marzo, un promedio diario de 159 camiones de ayuda cruzaron a Gaza por día, a pesar de que la ONU estima necesidades de 500.
La cifra más alta de ese mes se produjo el 28 de marzo, cuando 264 camiones entraron a través de los cruces terrestres de Kerem Shalom y Rafah.
No obstante, el ritmo actual se ve afectado de manera desproporcionada por las trabas para entregar asistencia alimentaria de emergencia, reconoció la Unrwa.
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