La Instrumentación de la nueva Ley de Pesca de Cuba y la aplicación de la Resolución 17 del 2023, que regula los procedimientos para la obtención de licencias de pesca en el país, fueron evaluadas en el municipio granmense de Río Cauto.
Allí tomaron parte en el intercambio una representación de los más de 300 pescadores del territorio, junto al viceministro de la Industria Alimentaria Orlando Borrego Elías y al presidente de la Comisión Agroalimentaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular, el diputado Ramón Aguilar.
Este es un proceso que se desarrolla con los pescadores en todo el país, en torno a las regulaciones de la pesca no estatal y la aplicación de la Ley de Pesca, bajo los principios de conservación, uso sostenible, enfoque precautorio, implementación de criterios científico-tecnológicos y la protección de los ecosistemas.
También comprende las regulaciones a cumplir acorde a normas nacionales e internacionales para la explotación de esos recursos pesqueros.
El viceministro de la Industria Alimentaria explicó a los pescadores riocautenses que el país registra cuatro actividades pesqueras principales, la deportiva, comercial, recreativa y de investigación.
Igualmente reconoció la existencia en ese territorio de 370 embarcaciones, con sus pescadores, de ellas 60 ya están legalizadas y el resto de los navíos en proceso de trámites a concluir en octubre.
Igualmente, valoró como positivo, y único en el país, que en Río Cauto, como parte de la estrategia de desarrollo local, estén incluidas las acciones para el desarrollo de la pesca.
Por su parte, Ramón Aguilar, presidente de la Comisión Agroalimentaria del Parlamento, significó el potencial del municipio Río Cauto para incrementar la acuicultura, mejorar la actividad pesquera y detalló que, por la Ley, el pescador se reconoce como un Trabajador por Cuenta Propia (TCP).
También se explicó en el intercambio que la comercialización del resultado de la pesca tiene aprobadas varias formas, como ventas al comercio o a la industria o la comercialización en puntos de venta, donde se han de cumplir con las regulaciones locales establecidas para los precios.
Los pescadores riocautenses compartieron sus preocupaciones e hicieron propuestas, para mejorar la actividad pesquera en la región y sobre sus aportes a la alimentación de la población.
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