Moscú-. El embajador de Cuba en Rusia, Julio Garmendía, resaltó que los vínculos entre ambas naciones hoy son de aliados estratégicos en el plano bilateral e internacional.
En su discurso de apertura de la recepción con motivo del aniversario 65 del triunfo de la Revolución cubana, el representante del país caribeño hizo un recuento de la evolución desde enero del 1959 hasta la actualidad de la historiografía nacional.
Asimismo, destacó los nexos de más de seis décadas entre Moscú y La Habana, desde la amistad brindada por la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) cuando Cuba enfrentaba, a decir de Fidel Castro, la etapa -tal vez más difícil- de la guerra desatada contra el pueblo por parte de los Estados Unidos.
“Es importante recordar que en aquellos adversos momentos fue precisamente la URSS la que extendió su mano solidaria y no sólo asumió la cuota azucarera rechazada por Washington, sino que comenzó una amplia colaboración en otras esferas de la actividad económica», acotó.
Garmendía argumentó que sería extenso contar los años de apoyo incondicional, ante lo cual detalló que en 2023 ambos Gobiernos firmaron importantes documentos para un impulso a la inversión directa de capital ruso en la economía cubana. En ese sentido, explicó que estos instrumentos serán una contribución a la creación de proyectos conjuntos mutuamente ventajosos en las esferas del turismo, agricultura, industria, salud, energética, entre otros.
Asimismo, exaltó que este año se celebran las seis décadas de la fundación por el comandante Ernesto Che Guevara y el cosmonauta Yuri Gagarin, de la Sociedad de Amistad entre Rusia y Cuba, la cual tiene representación en todo el territorio ruso.
El diplomático manifestó a los presentes en el encuentro que pese a los momentos difíciles por los cuales atraviesa el país antillano debido, en primer lugar, al recrudecimiento sin precedentes del bloqueo que por más de 60 años mantienen los Estados Unidos contra Cuba.
La inclusión en la ilegal lista de países patrocinadores del terrorismo, lo cual complejiza sobremanera la actividad comercial y financiera de la isla, las dificultades en la logística internacional, el aumento de los precios de los alimentos y otros productos, renglones que obstaculizan la situación interna cubana.
Además de otros factores, como la guerra mediática, la incitación al llamado cambio de régimen y otras acciones subversivas que se suman a la lista de acciones contra la Revolución cubana.
“Sin embargo, un día como hoy, en que conmemoramos los 65 años del triunfo revolucionario de 1959, quiero asegurar, que una vez más venceremos las dificultades y saldremos adelante, que seguiremos siendo un país solidario que comparte lo que tiene, no lo que le sobra y que, a pesar de las adversidades, Venceremos”, concluyó el embajador.
La velada estuvo presidida por la parte rusa por el primer vicepresidente de la Duma del Estado (Cámara Baja del Parlamento), Ivan Melnikov, y los viceministros de Asuntos Exteriores, Serguéi Riabkov, y el de Defensa Alexander Fomin.
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