Naciones Unidas-. El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, destacó hoy las históricas y sólidas relaciones bilaterales con la República Popular Democrática de Corea durante un encuentro con el representante permanente de esa nación ante la ONU, Kim Song.
En la reunión, celebrada en el marco del segmento nivel de la 79 Asamblea General de las Naciones Unidas, el titular de la diplomacia cubana trasladó un caluroso saludo al Partido, Gobierno y pueblo del país asiático.
El diálogo forma parte de la amplia agenda bilateral en la ONU del ministro de Relaciones Exteriores de La Habana que este martes también conversó con en mandatario de Vietnam, To Lam.
Rodríguez participó además en la instalación del Debate General, donde Cuba seguirá denunciando las arbitrarias medidas coercitivas unilaterales contra los pueblos del Sur y abogando por un sistema internacional equitativo y democrático, adelantó en un mensaje publicado en X.
Me reuní con el Representante Permanente de la República Popular Democrática de #Corea, Kim Song, en marco de #AGNU79.
Trasladé caluroso saludo al Partido, Gobierno y pueblo de ese hermano país.
Destaqué las históricas y sólidas relaciones bilaterales que nos unen. pic.twitter.com/qVDfpHah8M
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) September 24, 2024
Su agenda en el evento de alto nivel incluyó la víspera conversaciones con el canciller de Kenya, Musalia Mudavadi, con quien intercambió sobre gestiones para esclarecer la situación de los médicos cubanos Assel Herrera y Landy Rodríguez, secuestrados mientras prestaban servicio en esa nación.
Ese mismo día, el ministro caribeño dialogó con su homólogo de Singapur, Vivian Balakrishnan y le manifestó el interés de Cuba de avanzar en proyectos de cooperación bilateral, especialmente en áreas de salud y biotecnología.
Rodríguez viajó el sábado a Nueva York para participar en el evento inaugural de la semana de alto nivel; la Cumbre del Futuro.
Al intervenir ante el foro de 193 países, el canciller cubano reclamó mayor voluntad política para abordar los fallos estructurales y morales del sistema internacional que impiden avanzar hacia un futuro justo.
“Los pueblos necesitan menos injerencia y más solidaridad; menos intercambio desigual y más equidad; menos politización y doble rasero y más diálogo, cooperación y respeto a su derecho inalienable a elegir su sistema político, económico, social y cultural”, dijo.
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