
Tel Aviv-. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, sobrevivió hoy a una moción para disolver el Knesset (Parlamento), aunque salió debilitado tras mostrar las profundas divisiones de la coalición derechista en el poder.
Esta madrugada, tras horas de frenéticos contactos entre los legisladores, el proyecto presentado por la oposición fue rechazado por 61 diputados y respaldado por 53, con lo cual pareció alejarse la posibilidad de elecciones anticipadas.
Poco antes de la votación, los partidos haredíes (ultraortodoxos) anunciaron que se opondrían a la iniciativa, después de que el presidente del Comité de Asuntos Exteriores y Defensa del Knesset, Yuli Edelstein, informara de acuerdos preliminares sobre la ley del servicio militar obligatorio.
Desde la fundación de Israel, en 1948, los haredíes quedaron eximidos de ir al Ejército, una decisión rechazada por amplios sectores del país, en especial en la actualidad porque las Fuerzas Armadas están agotadas tras más de 20 meses de guerra en Gaza.
El 25 de junio de 2024, la Corte Suprema decidió exigirles realizar el servicio militar obligatorio y suspender el apoyo financiero a las instituciones religiosas cuyos estudiantes se nieguen a ser reclutados.
La medida provocó la ira de ese sector, en especial del partido Shas y del bloque ultraortodoxo Judaísmo Unido de la Torá, que forman parte del gobierno de Netanyahu.
Tras meses de intentos del primer ministro de buscar una ley de reclutamiento que satisfaga tanto a las formaciones haredíes como a los sectores laicos de su Ejecutivo, los primeros decidieron presionar y amenazaron con disolver al Legislativo.
Para aprovechar la situación, los partidos opositores, incluido Yesh Atid, liderado por Yair Lapid, e Yisrael Beiteinu, encabezado por el exministro de Defensa Avigdor Lieberman, anunciaron su intención de presentar un proyecto de ley en ese sentido.
En la votación de esta madrugada la división existente entre las fuerzas que comparten el poder quedó en evidencia cuando Agudat Yisrael, integrante de Judaísmo Unido de la Torá, votó con la oposición, y Degel HaTorah, otro componente del bloque, se opuso.
Las últimas elecciones parlamentarias se celebraron a finales de 2022, por lo cual las próximas deberían efectuarse en 2026, salvo que se realicen comicios anticipados.