
La guerra comercial desatada por el presidente de EE.UU., Donald Trump, ha costado a las empresas globales más de 34.000 millones de dólares en ventas perdidas y aumento de costos, según un análisis de divulgaciones corporativas publicado este viernes por Reuters.
No obstante, los economistas consultados por la agencia predicen que la cifra podría aumentar en un contexto en que la incertidumbre sobre las medidas económicas de la Casa Blanca afecta la toma de decisiones en algunas de las compañías más importantes del mundo.
Por ejemplo, firmas como Apple, Ford, Porsche y Sony han revisado o recortado drásticamente sus previsiones de beneficios. Una gran mayoría afirma que la naturaleza errática de las políticas comerciales de Trump ha imposibilitado una estimación precisa de los costes. En el estudio se analizaron estimaciones de 32 compañías que cotizan en el índice S&P 500, tres del STOXX 600 de Europa y 21 del Nikkei 225 de Japón.
Incertidumbre comercial
“No creo que las corporaciones tengan mucha visibilidad sobre el futuro”, afirmó Rich Bernstein, director ejecutivo de Richard Bernstein Advisors. “Si consideramos este mundo incierto y no podemos orientar a nadie hacia una cifra, es más seguro no orientar”, agregó.
Por su parte, Jeffrey Sonnenfeld, profesor de la Escuela de Administración de la Universidad de Yale, teme que el costo para las empresas probablemente será varias veces mayor del revelado hasta el momento. “Puedes duplicar o triplicar tu cifra y aun así diríamos […] que la magnitud será seguramente mucho mayor de lo que la mayoría de la gente cree”, explicó, advirtiendo sobre daños colaterales, como un menor gasto de los consumidores y mayores expectativas de inflación.
Entre tanto, un tribunal federal estadounidense de apelación resolvió este jueves aplazar de manera temporal el bloqueo de la introducción de las barreras arancelarias previamente dictaminado por el Tribunal de Comercio Internacional de EE.UU. al considerarlas ilegales.
- Trump anunció aranceles masivos el 2 de abril, imponiendo a la UE un gravamen del 20 % y a la mayor parte del resto del mundo, un impuesto base del 10 %.
- Ante el colapso de los mercados financieros, una semana después, el mandatario suspendió las tasas más altas durante 90 días para facilitar la negociación de acuerdos comerciales. Durante ese tiempo, impuso un arancel reducido del 10 % a más de 75 países que se habían dirigido a los representantes estadounidenses para abordar las tarifas y no habían tomado ninguna medida de represalia contra Washington.